Este año volverá a estar marcado por la disputa entre Estados Unidos y China a nivel geopolítico, ya que ambas naciones tratarán de reafirmar su poderío global en distintos campos. Los norteamericanos están perdiendo influencia en esta última década, mientras que el país asiático no deja de crecer y su proyección internacional está puesta en otras regiones como África o América Latina.
En el centro de este choque cultural se encuentra Europa, que también trata de hacerse un hueco ante unos retos centrados en la sostenibilidad y la innovación tecnológica como ejes centrales de cualquier cambio. Por supuesto, la digitalización, la robótica, las telecomunicaciones o la carrera aeroespacial se han convertido en los temas más candentes del momento, debido a las repercusiones económicas que pueden tener avances en todos estos campos.
Esta competencia estratégica entre ambas potencias se debe principalmente a la modernización tecnológica de China, algo que le ha permitido rivalizar con los norteamericanos a la hora de exportar productos y servicios. Eso sí, Estados Unidos sigue teniendo un papel protagonista como suministrador de redes 5G, algo que le otorga una ventaja competitiva fundamental de cara a los próximos años.
Dos potencias que cada vez atraen más turistas internacionales
No hay ninguna duda de que ambos países se encuentran en el centro de todas las miradas, algo que les ha permitido llamar la atención de los turistas para convertirse en dos de los destinos más atractivos. De hecho, su amplitud geográfica y su comunicación es inmejorable, por lo que hay millones de personas que deciden visitar estas naciones anualmente.
Estados Unidos y China lideran prácticamente todos los ránkings relacionados con el turismo, ya que cuentan con parajes naturales espectaculares, una riqueza cultural y artística excepcional, una gastronomía exquisita, etc. Uno de los ejemplos más llamativos tiene que ver con donde se encuentra el casino más grande del mundo, ya que ambos países ocupan ocho de las diez primeras posiciones.
Sin embargo, en este punto también se observan algunas diferencias, ya que ante el rápido crecimiento de China se contrapone el imperio cultural estadounidense. El país norteamericano sigue siendo una referencia en este ámbito, a pesar de que las distancias se han acortado mucho en un periodo muy corto de tiempo.
Una rivalidad que se extiende hasta en la carrera aeroespacial
Por último, merece la pena destacar la carrera aeroespacial como una de las últimas disputas más mediáticas, ya que Estados Unidos y China encabezan algunas de las misiones más importantes. El país asiático ha conseguido encontrar agua en la luna por primera vez, mientras que los norteamericanos han lanzado un potente telescopio que puede cambiar por completo nuestra manera de observar el universo.
Todo este tipo de luchas son muy positivas, debido a que implican un mayor progreso para la humanidad en general. Aun así, se echa en falta una cierta colaboración entre ambas potencias, debido a las reticencias chinas a la hora de compartir conocimiento o ceder en alguna de sus pretensiones.
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