- Establece horarios regulares para las comidas y… ¡cumple con ellos!
- Concéntrate en comer
- Cuida tu entorno
- Tenga cuidado con los sentimientos de comida
- Intenta alinearte… con tu cuerpo
- No tienes que ser un atleta, pero muévete siempre que puedas.
Nuestro cerebro tiene un gran impacto en nuestras elecciones diarias de alimentos. No es fácil «revertir» hábitos que nos han acompañado durante años. El cambio repentino puede llevar a la frustración, y esto hace que abandonemos rápidamente las decisiones «saludables». ¿Cómo lo evitas? Sobre todo, evita los pasos drásticos. Comience con pequeñas decisiones.
Establece horarios regulares para las comidas y… ¡cumple con ellos!
Concéntrate en comer
Comer bocadillos mientras haces otras cosas es un mal hábito que te hace comer mucho más de lo que planeas. Durante la comida, apague la computadora y deje el teléfono. Si no puede dejar de comer, por ejemplo mientras ve una película, busque una solución saludable. Se pueden usar vegetales asados en lugar de papas fritas. Comer bocadillos grasos por la noche te hace sentir aún peor al día siguiente. Asegúrate de cenar siempre: será más fácil rendirse Aperitivos por la noche.
Cuida tu entorno
El aspecto de su hogar o refrigerador tiene un gran impacto en la forma en que come. Si escondes dulces en cada armario y hay platos de bocadillos esparcidos por todo el apartamento, no es de extrañar que los alcances. Crea orden en tu entorno inmediato: la idea es que los alimentos sirvan solo para comer, no para llenar el tiempo. Come cuando realmente tengas hambre y trata de terminar de comer cuando tengas hambre. Una sensación de plenitud en el estómago.
Tenga cuidado con los sentimientos de comida
Recuerda que la comida es esencial para la vida, pero no debe hacerte sentir culpable. No se detenga en «fallar» al comer más de lo que había planeado. Una comida o un día en el que no ingieres alimentos particularmente saludables no marcará la diferencia a largo plazo; lo que importa es lo que sucede la mayoría de los días. La comida tampoco debería ser una recompensa: encuentre otras formas de recompensarse. Puede ser, por ejemplo, ir al cine o dar un paseo.
Intenta alinearte… con tu cuerpo
Recuerda: nadie es perfecto. Todos nos vemos diferentes y tenemos genes diferentes. Cuando se trata de hacer dieta y perder peso, no planifique lo imposible que lo lleva a una decepción constante. La implementación gradual de hábitos saludables dará resultados, pero hay que tener paciencia. No utilice el ayuno u otros métodos que pueden causar el efecto contrario.
No tienes que ser un atleta, pero muévete siempre que puedas.
Para muchos de nosotros, comenzar cualquier «aventura con el deporte» parece abrumador. Sobre todo si hemos pasado los últimos meses en el sofá. Comience con algo más simple: deambule donde pueda, tomando rutas tortuosas. Cuando llegues a casa, da otro paseo por ella. Cada paso cuenta cuando se trata de aptitud física y riesgo de enfermedad.
Fuente: bhf.org.uk; Wahl DR, Villinger K., König LM et al. Las elecciones de alimentos saludables son elecciones de alimentos felices: Evidencia de una muestra de la vida real utilizando evaluaciones basadas en teléfonos inteligentes. Representante científico.7, 17069 (2017). https://doi.org/10.1038/s41598-017-17262-9
«Alborotador. Ávido fanático del tocino. Practicante independiente del alcohol. Ninja de Internet. Introvertido. Adicto a las redes sociales. Experto en la cultura pop».
More Stories
¿Qué hacer para vivir mejor? Un experto en la regla de los 300 minutos y qué tirar de la nevera
El misterio de la muerte clínica. Los científicos han hecho un descubrimiento maravilloso.
Todos los días tenemos un producto popular en nuestra nevera. «Puede suponer un riesgo para la salud»